Deléitate con nuestros mini croissants de chocolate con pistachos: una mezcla irresistible en cada bocado. ¡Prueba la perfección pastelera!
Ingredientes (para 2 personas)
- 1 lámina de masa de hojaldre (aproximadamente 230g)
- 100g de Chocolate Negro con Aceite de Oliva Virgen Extra Arbequina
- 50g de pistachos salados y tostados de Les Garrigues
- 1 huevo (batido, para el glaseado)
- Azúcar glas (opcional, para decorar)
Tesoros para tus ojos: Pistachos, protectores de la visión
Los pistachos son ricos en luteína y zeaxantina, antioxidantes esenciales para la salud ocular. Estos compuestos protegen los ojos del daño causado por la luz ultravioleta y el estrés oxidativo, reduciendo el riesgo de enfermedades oculares como la degeneración macular relacionada con la edad.
Preparación de la receta
- Precalienta el horno a 200°C y forra una bandeja para hornear con papel pergamino.
- Derrite el chocolate Negro con Aceite de Oliva Virgen Extra Arbequina en un recipiente resistente al calor, ya sea en el microondas o al baño María. Remueve con frecuencia hasta que el chocolate esté completamente derretido y suave.
- Pica los pistachos salados y tostados de Les Garrigues en trozos pequeños con un cuchillo afilado.
- Mezcla el chocolate derretido y los pistachos picados en un tazón pequeño hasta que estén bien combinados. Esta mezcla será el relleno de los croissants.
- Extiende la lámina de masa de hojaldre sobre una superficie enharinada y córtala en triángulos pequeños con un cuchillo afilado.
- Coloca una porción de la mezcla de chocolate y pistachos en la base ancha de cada triángulo de masa de hojaldre.
- Enrolla cada triángulo comenzando desde la base ancha hacia la punta para formar los mini croissants. Asegúrate de sellar bien los extremos.
- Coloca los mini croissants en la bandeja para hornear preparada, dejando espacio entre ellos.
- Con un pincel de cocina, pinta la parte superior de cada croissant con huevo batido para darles un brillo dorado.
- Hornea en el horno precalentado durante unos 12-15 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes.
- Retira del horno y deja enfriar ligeramente sobre una rejilla.
- Opcionalmente, espolvorea los croissants con un poco de azúcar glas antes de servir.